viernes,
26 de junio de 2015
09:59 p.
m.
Descubrimiento o un
hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra
cosa distinta, eso significa.
Algo así, justo no
iba pensando en ti.
¿Por qué chingados
te tuve que conocer?, no me hubiera perdido de mucho…
No quiero tardarme
dos años en olvidar tu estúpido rostro, o el color que me confundía pues nunca
supe si me querías.
Saudade, en cada
segundo del día. De eso me hubiera perdido.
Podría imaginar ese
momento de otra manera.
La realidad es que
te vi de espaldas, ¿te acuerdas de que podía ver tus lentes y distinguirlos a
kilómetros?, algo así, reconocí tu espalda esa de la que me aferraba por las
mañanas cuando te ibas a trabajar.
Me quedé pasmada,
sentí como si hubieran apachurrado mi corazón o le hubieran encajado un
cuchillo caliente, me puse pálida.
No me viste, según
pienso.
Imaginaba que si nos
separábamos el día que nos reencontráramos mis ojos brillarían tanto que se
vería el reflejo en tus anteojos, imaginaba correr a abrazarte y hacer como si
nada hubiera pasado, imaginaba que tu sonreirías al verme de nuevo.
Buscaba algo que no
eras tú desde que tengo memoria, pero te encontré y aprendí a amarte con todo y
las deficiencias de amor que mostrabas.
Eres mi serendipia,
mujer de pocos halagos, de pocas caricias, de pocas palabras.
Mujer que me enseño
a odiar y a amar al mismo ser humano en un beso.
El mundo se lleno de
vacíos cuando te fuiste, pero la vacía eras tú.
Deja que los
arcoiris lleguen, deja que mis palabras hablen de alguien más, deja que mi
corazón deje de hablarte cuando siente dolor.
Hazte polvo, justo
como cuando te necesitaba.