lunes, agosto 17, 2015

Otro mal día con tu nombre....

Hacía ya mucho que no pasaba por aquí, por tu casa...
Refiriéndome a éste manojo de letras, por supuesto.
Aunque trato día con día de evitar palabras en donde tu nombre este implícito.
Aunque trato de alejarme de la realidad, alejarme de la fantasía, alejarme de todo,...
En este momento no se a quién pertenezco, si a mi cuerpo o a tu memoria, peor aún; creo que no le pertenezco a nada...
Flotando, así desde que tu no estás. Escribirte ha sido mi cura, pero a la vez es lo que te mantiene viva, al rojo vivo.
En la búsqueda de paz, en la búsqueda de lo que sea que me mantenga alerta y no como un andante adormilado.
Quería que me detuvieras. quería detenerte, quería que sostuvieras mi mano uno o dos cientos de años más, ¿cuántas veces detuviste mi corazón con tan solo dos palabras?, deténme, dime que me vaya, detén mi camino hacia tu hilo rojo, dime que me vaya....
Sosténme, abrázame una vez más, bésame los pedazos de corazón, besa mis heridas, bésame y cúrame de tu ausencia.

Estar sola, caminar sola, pensar en cuándo todo olía a ti, hasta la lluvia, extrañarte, ya no puedo dejar de extrañarte.
Escribirte, ya no puedo dejar de escribirte,
Te llevo en las fisuras de mi piel, en las comisuras de mus labios, en las pupilas y en lo poco que queda de corazón, en las risas que no provocas tú.
Verte en otras personas sin darme cuenta, buscar tu risa en otros seres, tocar otra piel en espera de que se impregne de ti, llevo más de ti en mi que tú.
Estar triste, mirar sin mirar, no vivir, tan solo matar el tiempo...

"¡No quiero a nadie más, no quiero a nadie más!" fueron las últimas palabras que te dije, ¿lo recuerdas?, ¿recuerdas cuánto deseabas irte?

Tal vez tu estás lejos, pero todavía te alcanzo a ver...